Brasil evita denunciar a Putin en el Consejo de Seguridad y pide diálogo

En un discurso pronunciado ante el Consejo de Seguridad de la ONU, este jueves, el Gobierno brasileño evitó condenar a Rusia por la invasión de Ucrania, las sospechas de delitos y las amenazas vertidas en los últimos días sobre un posible uso de armas nucleares por parte de Vladimir Putin.

En declaraciones a los demás ministros del principal órgano de seguridad de la ONU, el canciller Carlos França insistió en que el objetivo de Brasil es crear las condiciones para que se establezca el diálogo entre las partes en conflicto.

La reunión se produjo en uno de los momentos más tensos desde el inicio del conflicto, con el Kremlin insinuando que podría usar todas sus armas para defenderse, ampliando la movilización a 300.000 hombres e incluso apoyando la anexión de cuatro regiones de Ucrania. Durante la reunión, los estadounidenses, franceses y británicos no escatimaron críticas contra Putin.

Brasil, por su parte, optó por no mencionar el nombre de Rusia en su discurso. “La guerra afecta a todos, incluso en regiones alejadas de las hostilidades. El Consejo de Seguridad es el lugar apropiado para buscar una solución con una paz duradera”, dijo. Durante el encuentro llamó la atención la decisión de Sergey Lavrov, jefe de la diplomacia rusa, de abandonar la sala tras entregar su mensaje, sin esperar los discursos de otros países.

El gobierno brasileño, sin embargo, optó por un tono diferente al establecido por europeos y estadounidenses, denunciando la invasión rusa y la mención “irresponsable” del Kremlin sobre un eventual uso de armas tácticas.

Durante su discurso en Nueva York, en ningún momento el canciller brasileño mencionó que Ucrania fue invadida por Rusia y no tocó el tema de las amenazas nucleares de Putin. No se hizo ninguna referencia a los rusos, ni siquiera al hablar de casos de presuntos delitos, ya denunciados incluso por organismos de la ONU.

Según él, en los últimos siete meses, el Consejo ha recibido denuncias de violaciones de derechos humanos, incluso contra mujeres, niños y las poblaciones más vulnerables.

Pero, nuevamente, no mencionó el hecho de que varios de estos informes acusaron explícitamente a las fuerzas rusas de actos criminales.

Francia se limitó a indicar que Brasil “condena los abusos y defiende investigaciones independientes de los hechos” para que “los responsables” sean llevados ante la justicia por sus acciones. Una vez más, ninguna mención explícita de los rusos.